El pulgarcito de America no se rinde

Emersonn Palencia, Reporter

Muchas veces estamos acostumbrados a subestimar a Centroamérica por su economía, pobreza, delincuencia, y que no es relativamente extensa en territorio; pero sí en corazón. Destacando su solidaridad, el apoyo entre todos y el orgullo de ser Centroamericanos. Como bien dice un dicho popular “No juzgues un libro por su portada,” de igual manera nada ni nadie puede ser juzgado sin saber que hay dentro de da cada individuo o país.

Actualmente, el mundo entero está de rodillas ante un virus que no se sabe con exactitud de donde proviene, pero se cree que fue contraído de un animal o si realmente fue creado a propósito. El Salvador es el país más pequeño de todo Centroamérica por lo que es llamado y reconocido como “El pulgarcito de America.” 

No importa que tan poderoso o influyente sean otros países a comparacion de El Salvador, ha sido uno de los muy pocos países con los menos casos de COVID-19. 

Fue gracias a la prontitud del presidente Nayib Bukele que permitió una excelente protección.

Preidente de El Salvador Nayib Bukele

 Al saber los riesgos que los ciudadanos corrían cerró las fronteras, aeropuertos, he incluso la detención de personas que no cumplieran con el aislamiento domiciliar y entre otras medidas necesarias para evitar que el virus llegase y se propagara en El Salvador. Se le pidió al ejército que asegurara los puntos ciegos en las fronteras  alrededor del país. 

Por un corto tiempo fue una buena manera de proteger a la ciudadanía, se cerraron iglesias, centro comerciales, lugares que no eran esenciales y se inició la cuarentena. Para mediados de abril 4,236 personas fueron detenidas en 87 centros de contención ya sea por salir de sus hogares o que venían del extranjero. Muchos han llegado a llamar al presidente dictador porque se cree que ha promovido el abuso del poder y atentar contra la democracia. A pesar de denuncias y acusaciones, el presidente Bukele ha tomado decisiones drásticas que han ayudado a El Salvador. 

El primer caso confirmado en El Salvador de COVID-19 fue el 18 de marzo, después de realizar 59 pruebas a presuntos pacientes sospechosos. Como previamente dije se tomaron medidas de protección cuidando las fronteras y puntos ciegos. 

Lastimosamente, esta persona que dio positivo a la prueba fue la que entró al país comenzando con el contagio. Desde entonces el 22 de abril El Salvador está en la fase 2 de la pandemia. “Eso quiere decir que estamos en la fase de contagio comunitario y el riesgo de enfermarse es altísimo,” declaró el presidente Bukele. El presidente hizo un publicado el día 28 de abril en su red social de Facebook diciendo, “Este día realizamos 1,229 pruebas de #COVID-19, 1,197 negativas/ 32 positivas.” Los contagios totales hasta el dia de ahora son 377 confirmados, 109 personas recuperadas y 9 fallecidos. 

De los 9 ya fallecidos uno de ellos fue un niño originario del Rosario de La Paz. Tras esta gran pérdida del niño fallecido el presidente publicó un mensaje en su Twitter, “Es la víctima más joven que registra nuestro país.Sus padres están en cuartos de cuido, como nexos epidemiológicos, esperando los días de incubación, para saber si son positivos también.”

 Al igual que aquí en Los Estados Unidos, los salvadoreños tienen prohibido andar sin mascarilla por las calles (o solamente con una razón justificada). “No tener una mascarilla  no es justificación, no hay salvadoreño que no tenga un pedazo de tela en su casa,” firmemente dijo. Se sabe que la tela no protege completamente, pero algo es mejor que nada. 

Constantemente, se están realizando pruebas de las cuales siguen saliendo resultados positivos.Sólo es cuestión de obediencia, tiempo y más prevenciones para poder combatir con esta pandemia. La clave del suceso es permanecer unidos como comunidad siempre y cuando se respeten las leyes, procedimientos y recomendaciones para lograr un control efectivo sobre el COVID-19.

La unión hace la fuerza.